Bishop President FRANCISCO LLORENTE
(1890 -1928)
Francisco Llorente es uno de los primeros y más destacados líderes pentecostales latinos en Estados Unidos de Norteamérica. Su lugar de nacimiento fue Acapulco, estado de Guerrero, México, y a pesar que no alcanzó una carrera profesional, se sabe que tuvo buenos estudios. Siendo muy joven, Francisco Llorente emigro a los Estados Unidos. En año de 1912, teniendo poco tiempo de haber llegar a la ciudad de San Diego escucho el poderoso mensaje de la palabra de Dios por medio de hermanos norteamericanos del nombre de Jesucristo. Meses después en este mismo año, fue bautizado por el ministro Juan Navarro Martinez (el hermano Juan Navarro, fue uno de los primeros mexicanos en experimentar el derramamiento de El Espíritu Santo de Dios en la calle Azuza en Los Angeles California) y días después fue bautizado con el Espíritu Santo. El llamado de Dios fue tan fuerte en la vida del hermano Llorente que ese mismo año fue ordenado evangelista y se lanzo a la predicación del evangelio viviendo solo por la fe. Ya para el año de 1913 en el área de San Diego, creyentes eran bautizados en el nombre de Jesucristo como fruto de su trabajo evangelistico. Este mismo año el hermano Llorente se caso con la hermana Josefina R. F. de Llorente con quien tuvo tres hijos. En 1914 bautizo al hermano Marcial de la Cruz.
En el año de 1916 conoció al hermano Antonio Castañeda Nava. Después estos dos hermanos se unieron con el hermano Llorente en el trabajo de la obra de Dios. Este hombre humilde, de origen mexicano fue el primer líder de un buen número de hermanos que con el tiempo se organizaron para suplir las necesidades de otros hermanos de la misma fe. Con el tiempo, su dedicación y pasión por la obra de Dio le permitió consolidarse como líder sobresaliente entre los varios grupos de hermanos que se encontraban diseminados en varias ciudades de California, especialmente el en Sur de este estado. La capacidad del hermano Llorente para ministrar era manifiesta con tal poder y virtud de Dios que la unción y respaldo Divino eran evidentes. En el libro Mis Memorias escrito por el Obispo-historiador José A. Ortega, se narra como el hermano Llorente “Mientras caminaba por los pasillos de la pequeñas congregaciones exponiendo la palabra de Dios, la gente recibía el Espíritu Santo, sanaba milagrosamente, o era tocada por el Poder de Dios” (pg. 276). Su liderazgo eficaz resulto en su nominación y elección como el primer Pastor General titulo que después cambio a presidente de la Iglesia de la Fe Apostólica del Pentecostés (nombre inicial de la Asamblea Apostólica). Los primeros años fueron difíciles para la naciente Iglesia debidos a factores de distancia geográfica entre los grupos de creyentes, necesidad de establecer lineamientos doctrinales, y reglamentos ministeriales. Este trabajo de liderazgo lo llevo a cabo asistido eficazmente por el hermano Antonio Castañeda Nava. Aunque la naciente Iglesia siempre trabajo independientemente de otros movimientos, el ministerio del hermano Llorente recibió la asistencia, y reconocimiento oficial de el movimiento conocido como Pentecostal Assemblies of the World (Asambleas Pentecostales del Mundo).
Por fin, en 1925 se convoco a la primera convención general de la Iglesia. Conforme estos grupos de creyentes fieles a la doctrina del nombre de Jesucristo llegaban a acuerdos de unidad, organización y doctrina bajo el liderazgo del hermano Llorente, de igual manera su nombre como Iglesia se definía. En la primera convención general se le nomino y resulto electo Pastor General. Después de varios años de su conformación la Iglesia adopto el nombre de Asamblea Apostólica de la Fe en Cristo Jesús, nombre con el que hasta hoy es conocida. En 1927 murió su esposa y a finales de este año contrajo matrimonio con la hermana Juanita Peach. Después de este evento se traslado a vivir a Yuma, Arizona. El hermano Llorente falleció de paro cardiaco a temprana edad el día 10 de Septiembre de 1928. Durante el tiempo de su funeral, el 1er Volumen de Historia de la Asamble Apostolica narra que los hermanos comentaban: “... Creemos que Dios lo llamó al descanso porque lo amaba, tomando en cuenta sus sufrimientos y amor a la causa de Cristo ...”
Escrito por: Abraham Ruiz
LOGROS:
Ser el primer Pastor General (titulo que después cambio al de presidente) de nuestra Iglesia. Ser el primer líder latino dentro de nuestro movimiento en ser reconocido por otro movimiento pentecostal ya establecido. Fue reconocido como Pastor General-Presidente durante las tres primeras convenciones generales de nuestra Iglesia. Entre sus mayores logros se cuentan: su liderazgo, su consagración al trabajo evangelístico, su consolidación como líder de la naciente Iglesia. Como himnólogo, el hermano Llorente compuso hermosas alabanzas que hoy son clásicas, tales como: “Jesús me habló,” “Jesús Solo Es Dios”, y “En El Cielo Mansión.” Su legado como pionero y fundador en el campo del pentecostalismo moderno entre el pueblo hispano es innegable. Indudablemente nuestro primer presidente fue notable por su talento en el liderazgo espiritual y su capacidad de ministrar la palabra de Dios en los inicios de la Asamblea Apostólica de la Fe en Cristo Jesús.
El destacado liderazgo y contribución del hermano Francisco Llorente entre los primeros lideres latinos pentecostales es plenamente reconocido por The New International Dictionary of Pentecostal and Charismatic Movements (El Nuevo Diccionario Internacional de Movimientos Pentecostales y Carismáticos).
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